Opinología: Los cubiertos (parte 1)

Con esta empiezo una serie de pequeñas entradas en las que me apetece compartir otra forma de ver las cosas sobre diferentes temas. Va dirigida a todo el mundo, pero en especial a aquellas personas, abuelxs, amigxs, primxs, vecinxs... que se entrometen, en ocasiones demasiado, opinando sin que les preguntemos en nuestra forma de criar a nuestrxs cachorrxs.
Aclaro que doy mi punto de vista. Puede ser diferente al tuyo... o no... Pero me parece importante tener en cuenta el punto de vista de lxs peques.

Empiezo esta primera hablando de...

Los cubiertos

Comer con las manos no es una guarrería. Los bebés se sienten atraídos por la comida. Les gusta tocarla, estrujarla con sus manos, tirarla al suelo e incluso oír el sonido que hace cuando la lanzan... Es de esta manera como pueden captar su textura, su forma, su consistencia... Y es así como se relacionan con ella, a través de sus manos.

Me parece bien poner los cubiertos en la mesa familiar para que poco a poco, y cuando ellxs se sientan preparadxs, empiecen también a explorar a través de ellos. Está bien recordar que muchas de las cosas que aprenden lo hacen por imitación. No tiene sentido obligar a un peque a que aprenda a usar la cuchara y el tenedor a partir de equis meses. Ya tendrá tiempo de mayor de usarlos correctamente y se dará cuenta por sí mismx de que están fabricados para ayudarnos... la mayoría de las veces. Para el resto de situaciones... quizás disfrute mucho comiendo con las manos, como cuando era pequeñx.

La próxima vez que veas a un bebé comer con las manos, sólo disfruta de la experiencia y observa. Observa mucho. Saca fotos, sonríe y goza de ese momento tan especial con la criatura. El tiempo pasa demasiado rápido para obcecarse en "enseñar" algo que no se necesita.

En esta sociedad hay alimentos permitidos que sí podemos comer con las manos, pero ¿por qué otros no?  Os propongo simplemente estar desde el no-juicio. Importante: lavarse bien las manos antes y después ¡y listo!.

Y tú, ¿eres de lxs que comen algunas cosas con las manos sin preocuparte? Yo sí :-)

Si te ha gustado... puedes seguir leyendo.
Opinología (Parte 2): ¡Ponte la chaqueta que tengo frío!
Opinología (Parte 3): El placer de portear
Opinología (Parte 4): ¡Verás cuándo nazca tu hermanita!